Aquel circulo que nos envuelve y no para, aquel punto que me sostiene todo esto, es lo único. Pero si incides sobre mi, mi cuerpo empezará a partirse en dos, para que la mitad de mi pueda seguir viviendo y la mitad de ti no se sienta abandonado. No espero quejas ya no espero nada.
Y yo te odio un poco por no esperar nada.
ResponderEliminar